LAS “CHACHAS” DE LAS ESCUELAS INFANTILES  

EN LA COMARCAS DE ESTEPA-OSUNA:

POBREZA SALARIAL Y PRECARIEDAD LABORAL.

En la última campaña electoral a las municipales de mayo de 2019, ni los candidatos, ni los partidos politicos  han hablado de la creación de empleo, ni de la mejora de las condiciones laborales de las trabajadoras de los Servicios de Proximidad, entre las que se encuentra las empleadas de las EE.II ( Escuelas Infantiles).

Pero en cambio , como resultado de la perversión de lo que los distintos gobiernos locales entienden como desarrollo local, convertir el ayuntamiento en la mayor empresa de contratación del pueblo, la nueva versión neocaciquismo del medio rural andaluz, presenta como un triunfo “ la rotación de los puestos de trabajo, y los miles de contratos de trabajo realizado desde el ayuntamiento de turno”. Lo que se presenta como un exito, es la mejor manifestación del fracaso o la inexistencia de una política de desarrollo territorial, que potencie la diversificación de la economía local. Los ayuntamientos se han convertido en la gran bolsa de caridad, y recordemos que la miseria es lo único que al repartirla aumenta, e incrementa el voto cautivo, ya que se intercambia favores por votos. Debido a la puesta en funcionamiento de esta singular relación de dependencia, la rotación o la alternancia en los gobiernos locales es muy complicada, eternizándose los alcaldes, a los hechos nos remitimos.

En el mes de mayo de 2019 ha saltado a los medios de comunicación nacional las condiciones laborales  en que se encuentran l@s trabajadoras de las EE.II (Escuelas infantiles), las antiguas Guarderías.[1]

Este tema fue abordado el 7 de mayo de 2017, en este portal “LAS ESCUELAS INFANTILES (EE.II.) EN LOS MUNICIPIOS DE LAS COMARCA ESTEPA-OSUNA” [2]. Pero es necesario que volvamos a hacer una serie de puntualizaciones, recogidas en el informe elaborado “Servicios de proximidad en territorios rurales” ( nº de expediente 20095110501000062 ). Recordemos que dicho proyecto fue subvencionado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural Marino concedido a ADR Estepa-Sierra Sur, siendo contratada para la ejecución del proyecto técnico Iniciativas Comunitarias de Desarrollo Estepa-Sierra Sur S.A[3]., contando con una partida presupuestaria de 1.000.000 €.

Los datos recogidos en aquel informe ponían en evidencia la precariedad laboral y pobreza salarial de l@s trabajar@s de dichos centros, junto a una fuerte brecha en las condiciones laborales entre los trabajadores de las EE.II. de la comarca y las del medio urbano. Pero dentro de la misma comarca, la brechas también existe entre la EE.II de las dos cabeceras comarcales Estepa y Osuna cuya titularidad es de la Junta de Andalucía, y el resto de trabajadores de las EE.II. gestionadas directamente por los ayuntamientos o por otras entidades por concesión administrativa municipal.

De las 168 personas contratadas en las distintas EE.II. de la comarca el 93% son mujeres (datos de 2010). Nos encontramos con un empleo fundamentalmente femenino, y esta feminización del trabajo se traduce en esos bajos salarios a pesar de la alta cualificación del personal contratado. Algunos de las contratadas tienen una cualificación profesional por encima de la requerida, para el puesto de trabajo, pero son contratados por categoría profesional inferior. Por  tanto las trabajadoras sufren una triple discriminación por ejercer su trabajo en EE.II del medio rural, por ser contratadas directamente o indirectamente  por la Administración Municipal, y por ultimo por ser mujeres. Los salarios que perciben las mujeres difícilmente podrían ser aceptados si la relación de varones contratados superaran el 50% del personal contratado en las EE.II. Los varoness son considerados cabeza de familia y como tales los sustentadores de la economia local, el machismo laboral tambien se pone en evidencia, ya que estos dificilmente aceptarian las condiciones laborales existentes en las EE.II de la comarca. La mujer como trabajadora rural suele ser mas sumisa, ya que sus ingresos se consieran como complementarios.

Las diferencias entre las EE.II de titularidad autonómica y las municipales, no son solo de remuneración entre trabajadores y derechos laborales que prestan un mismo servicio, sino también de equipamiento y dotación de personal, lo que influye en la calidad del servicio que recibe la población destinatarias, los niños entre 0-3 años. La carga de trabajo y presión por trabajadora contratada es mayor en las profesionales de las EE.II. municipales o concertadas que en la de titularidad autonómica. Mismo trabajo, misma capacitación profesional, pero más baja valoración social y muy  distinta remuneración salarial.

En un mercado laboral comarcal, donde el paro y la precariedad es una realidad palpable, los ayuntamientos al prestar este servicio, obtienen inicialmente rentabilidad política prestan un servicio y crean empleo, pero nunca se han planteado de forma seria el grado de explotación en que se encuentra l@s trabjador@s , con escasa remuneración salarial en comparación con las trabajador@s de los centros de la Junta. Por otra parte algunos trabajadores señalaban la precariedad laboral en que se encontraban sus contratos, muchas veces condicionados por “circunstancias externas” El neocaciquismo rural andaluz protagonizado por las administraciones locales se vuelve a poner de nuevo de manifiesto. Algunos ayuntamientos en aquellas fechas rotaban cada cierto tiempo la bolsa de las personas contratadas en las EE.II. aunque era una medida que se vendía como” repartir el trabajo” ( democratizar la precariedad) ,en realidad esta medida se convertía en un instrumento de presión laboral, reforzando la precariedad y recordando a las trabajadoras la potestad de ayuntamiento de turno en hacer o renovar los contratos. Dichas medidas primaban la injerencia política y el control político más que la calidad del servicio. Según las trabajadoras entrevistadas “imperaban más los  criterios políticos que educativos, sin mirar la calidad del servicio, y la atención de los menores”. En las entrevistas realizadas en 2010, se detectaba que el grado de protesta o descontento de las trabajadoras se autocontrolaba “cuando el que contrataba era el Ayuntamiento”. Las reivindicaciones laborales se ponen   de manifiesto con mayor intensidad cuando la gestión era privada, y/o la EE.II se encontraba localizada en una ciudad. El miedo a perder el empleo esta mas latente en el medio rural que en el urbano, donde existe mas alternativas laborales.

Los sueldos en 2010 no superaban en la mayoría de los casos 600 €,según comentaban las trabajadoras encuestadas. En 2019 las remuneraciones apenas se han incrementado, y se han utilizado artimañas para cumplir la nueva normativa del S.M.I.( Salario Mínimo Interprofesional). El sueldo según algunas profesionales del sector está prácticamente congelado en la comarca desde 2010.

Otro hecho llamativo es la implantación de contratos a  tiempo parcial, cuando la jornada en las EE.II es de 8 a 17 horas. Estos contratos a tiempo parcial  supone una mayor carga de trabajo con menos horas de contrato. Son ratios abusivas, cuando la función de las  EE.II. no es solo “guardar a los niños”, y tenerlos aseados.Nos encontrábamos, según las encuestadas en 2010, con  la no remuneración en   muchos casos de los meses de vacaciones, práctica que parece continuar aún en 2019 en algunos centros, dando por finalizado el contrato al terminar el calendario escolar.

La media de la remuneración en la EE-II de la comarca está muy lejos de los 900 €/mes cobrados en las EE.II externalizadas en el medio urbano, y a una diferencia abismal de las remuneraciones de la EE.II, cuya titularidad es la Junta de Andalucía.

Los empleos generados refuerzan la discriminación salarial, y no supone una mejora de las condiciones de vida de los empleados en las EE.II. de la comarca con titularidad municipal. Se ha perdido una oportunidad de crear empleo de calidad relacionada con los Servicios de Proximidad, que facilitara  a la población joven con formación  y con salarios dignos a permanecer en el territorio. Los bajos salarios, ha favorecido en muchos casos que las trabajadoras más jóvenes en edad de crear una familia y  con mayor formación se vean obligadas a abandonar el medio rural.

Como se comentaba  en el artículo antes mencionado “Todos estos aspectos van a condicionar posiblemente la calidad del servicio que se preste, y puede ser determinante  a la hora de favorecer la fijación de la población joven con formación en el territorio, de que se incremente la baja natalidad y se frene el envejecimiento de la población”

El objetivo de potenciar los Servicios de Proximidad en el medio rural, entre los que se encuentran las EE.II. según las propuestas recogidas en el “Libro Blanco”[4] de Jacques Delors, era fijar la población en el medio rural, frenar la despoblación, él envejecimiento, e incrementar la natalidad. Pero de una manera perversa las condiciones laborales a las que se encuentran sometidas “las chachas de las populares guarderías” dan como resultado la potenciación de la emigración, y el despoblamiento de nuestros municipios.

Junio 2019

Ramón Ortiz Benjumea

Geografo, técnico en desarrollo territorial y comarcano.

[1]  Son innumerables los artículos publicados en la prensa escrita ,algunos de ellos con títulos tan llamativos  como el publicado en el diario El País el 27 de mayo de 2019  “Las educadoras de escuelas infantiles en manos privadas, en huelga por unos sueldos que rozan la pobreza” https://elpais.com/sociedad/2019/05/20/actualidad/1558377993_182370.html

[2] https://www.ortizbenjumea.com/las-escuelas-infantiles-ee-ii-en-los-municipios-de-las-comarca-estepa-osuna

[3]  Puntualizar que el proyecto fue adjudicado por ADR Estepa-Sierra Sur a Iniciativas Comunitarias, siendo los órganos de gestión de ADR Estepa-Sierra Sur e Iniciativas Comunitarias los mismos. Las dos entidades compartían  Presidente, Gerente, y Consejo de Administración. La contratación fue aprobada por el Consejo de ADR.

[4] Boletín de las Comunidades europeas 6/93 Libro Blanco “Crecimiento, competitividad, empleo. Retos y pistas para entrar en el siglo XXI”, conocido popularmente como Libro Blanco de Delors (Jacques), se hace referencia a la necesidad de potenciar el empleo mediante los Nuevos Yacimientos de Empleo, e incluyendo en este apartado los Servicios de Proximidad