En apartados anteriores ya hemos señalado que se ha de acudir a los datos de Paro Registrado, facilitados tanto por el S.A.E y S.E.P.E. (Servicio Público de Empleo Estatal) que se publican a los dos días del mes de referencia, y ser la única fuente que nos desagrega los datos a nivel municipal

Los parados registrados de un sector económico son en teoría la mano de obra de reserva, y/o también el exceso de mano de obra existente en dicho sector. Desglosar la evolución de los parados registrados por sexo, nos ayuda a entender el protagonismo de cada sexo, y como una situación económica concreta castiga y convierte en protagonista a uno de los dos sexos: mujeres y varones. Para intentar entender el comportamiento del mercado laboral agrícola en concreto habría que hacer referencia también al conjunto del total de parados registrados, que nos ha de servir de referencia.

Gráfico 1. Evolución porcentual del paro registrado total, desglosado por sexo.2006-2019.Fuente: SEPE, Observatorio Argos. Servicio Andaluz de Empleo.

En cuanto a la caracterización del paro registrado según sexo, durante el periodo analizado 2006-2019, se producen cambios de comportamiento importantes, pudiendo señalar que en líneas generales la población masculina resulta inicialmente la más perjudicada.

Se distinguen claramente tres etapas: una comprendida entre 2006-2008,otra entre 2008-2013, y la última etapa a partir de 2013. El gráfico anterior (Gráfico 1) nos pone de manifiesto la ruptura que se produce a mediados del 2008, donde las mujeres han dejado de ser las protagonistas del paro registrado, y son sustituidas por los varones, desplazando en esta situación de paro registrado a las mujeres. El impacto de la crisis entre 2008-2013 ha recaído en la población masculina, que son expulsados del mercado laboral mayoritariamente, aunque paulatinamente la diferencia entre ambos sexos va disminuyendo.

A partir de finales de 2013, las mujeres vuelven a superar a los varones, un nuevo cambio de tendencia, volviendo a la situación inicial anterior a la crisis, donde las mujeres eran las protagonistas del paro registrado.

Se ha producido, por tanto,  en los últimos años, tras el primer impacto de la crisis en el mercado laboral, un fenómeno lo que se ha denominado como “igualdad a la baja”. Inicialmente  la situación de los varones empeoraba considerablemente, pero posteriormente la situación de  las mujeres también lo hacían pero en menor medida.

Podemos aventurar la existencia de dos etapas dentro de la crisis. En un primer momento la crisis afecta a los varones, al ser el componente mayoritario de la población ocupada de la comarca, y al castigar el desempleo a sectores y actividades fuertemente masculinizados (construcción y actividades relacionadas con este sector). Esto a su vez obliga a la mujer a salir activamente al mercado laboral dejando de ser  demandante pasiva, e insertándose laboralmente, aceptando cualquier  empleo, compitiendo con los varones por los mismos empleos, correlación inversa que se perfila de forma clara en el gráfico correspondiente. En la segunda etapa, la evolución de la crisis empieza a afectar a sectores fuertemente feminizados, al sector servicios, a la industria de la pastelería industrial, que responde ante la crisis con la disminución de empleo, y por último  al romperse, con la intensificación y mecanización de la recogida de la aceituna, la paridad existente entre varones y mujeres en el campo andaluz, donde la mujer es expulsada a favor de los varones, por criterios basados en la mayor resistencia física. Pero otro aspecto a destacar es como entran en conflictos en los meses de actividad económica y como el descenso de los varones supone un incremento de las demandantes femeninas, nos encontramos con el conocido “efecto espejo”. El descenso de las oportunidades de trabajo disminuyen y eso supone que entren en competencia por estos puestos de trabajo tanto los varones como las mujeres, el posicionamiento de un sexo tiene su repercusión o su reflejo negativo en el otro sexo.

La reflexión que en otros estudios realizábamos en 2012sigue siendo válida [1] :“La situación económica actual ha modificado el perfil de la población en situación de paro registrado. El 55% de las personas en situación de desempleo son varones (agosto 2012), mientras que en fechas anteriores las mujeres suponían más del 60%. El gráfico expresan de forma clara ese cambio de tendencia que se registra con el inicio de la crisis y cambio de ciclo económico, ya que hay un momento concreto a partir de la cual la situación entre varones y mujeres se invierte, y nos encontramos con una correlación inversa, con situación de competencia entre los dos sexos, la inserción laboral de las mujeres incide negativamente en los varones, parece que entran a competir los dos sexos por el mismo puesto de trabajo.

El gráfico nº1 nos ponen de manifiesto el cambio de tendencia y como los protagonistas del paro registrado, a partir de julio de 2008, son los varones. Este cambio de tendencia es común a los países del entorno europeo. En todos los países, salvo en el Reino Unido, el desempleo de las mujeres era superior al de los varones antes de la crisis, pero ya en 2010 se ha igualado. El caso más extremo es el de España donde el desempleo de las mujeres prácticamente duplicaba el de los varones en 2006,  en el  2010 en el conjunto nacional ( España )  se redujo la diferencia ,entre varones y mujeres, a sólo un punto”.[2]

Como se ha puesto de manifiesto, la mujer es inicialmente la protagonista del paro registrado, salvo la etapa comprendida entre 2008-2013, donde la Gran Recesión afecta mas a los varones que a las mujeres. Pero tras este paréntesis las mujeres vuelven a ser mayoritarias en el total de paro registrado.

¿ Pero en el mercado laboral del sector agrario la tendencia es similar? . Veamos lo que nos dice los datos, para lo cual nos centramos en el gráfico nº 2.

Gráfico 2. Evolución porcentual del paro registrado sector agrícola, desglosado por sexo.2006-2019.Fuente: SEPE, Observatorio Argos. Servicio Andaluz de Empleo.

En una primera fase la mujer es mayoritaria dentro del paro registrado en el sector agrícola, concretamente entre enero de 2006 y agosto de 2007, con un comportamiento y tendencia similar al conjunto de todos los sectores económicos. Pero a partir de 2007, salvo en momento muy puntuales los que soportan el paro registrado son los varones. Existe un comportamiento de “efecto reflejo”  entre ambos sexos, y con fuertes dientes de sierra, aunque la diferencia entre los varones y las mujeres disminuyen.

El mercado del sector agrícola vuelve a tener  un  comportamiento distinto y particular  al resto de los sectores económicos. La Gran Recesión Económica tiene un impacto menor, y es el varón el que soporta en mayor medida el paro, quizás esto sea debido a que la mujer ha sido expulsada del sector agrario, o se ha auto expulsado, abandona ante las escasas expectativas de empleo y se registra como demandante de empleo dentro de otros sectores de actividad, no vinculados con las tareas agrícolas, donde las posibilidades de encontrar trabajo son mayores. ¿ Se puede considerar que es un síntoma de la masculinización del sector, y que la mujer actúa solo como mano de obra  en reserva y/o muy residual  ?

Hay una serie de amenazas y problemas pendientes de plantear y de resolver. El envejecimiento de la poblacion activa en general y en concreto de la poblacion activa del sector agrario; la perdida de poblacion de la comarca, que avanza como un cancer sin detectar  lentamente;la emigracion de la poblacion joven que refuerza la situacion critica demografica; y los efectos del covid-19 sobre el medio rural.

Dificilmente se pueden plantear resolver las amenazas si no son detectadas o ignoradas, igual que no se puede actuar para frenar un cancer si este no ha sido diagnosticado previamente. Pero estas amenazas , no tengamos la menor duda, haran acto de presencia en los próximos años.”Doctores ,dicen, tiene la iglesia”

Herrera, 13 de mayo de 2020

Ramón Ortiz Benjumea.

Geógrafo, tecnico de desarrollo territorial, master en desarrollo localy comarcano.

NOTAS:

[1] EXCLUSIÓN SOCIAL Y JUVENTUD.LA JUVENTUD DESDE UNA PERSPECTIVA LABORAL Y  DE EXCLUSIÓN SOCIAL. Iniciativas Comunitarias de Desarrollo Estepa-Sierra Sur. 2012.

[2] Crisis y fractura social en Europa. Causas y efectos en España. Miguel Laparra y Begoña Pérez Eransus (coordinadores) Colección Estudios Sociales núm.35. Obra Social “ La Caixa”.2012.