Por Juan E. Mena Cabezas

A MODO DE INTRODUCCIÓN

Juan E. Mena Cabezas, nos hace una reflexión sobre el arboricidio, la tala injustificada de árboles, que no solo afecta a los pequeños municipios rurales del interior andaluz, sino a espacios tan emblemáticos como la Muralla de la Macarena y el Parlamento de Andalucía. Paradójicamente a las puertas del Parlamento y con la aprobación de la Comisión de Patrimonio con toda impunidad se acometen estos despropósitos, que puede suceder en cualquier pueblo perdido, cuando el alcalde de turno, quiere hacer visible su obra más emblemática, que lo inmortaliza.

EL PAPEL DEL ARBOLADO EN LAS ISLAS DE CALOR

Diversas entidades sociales, grupos de ciudadanos  y ONG’s de Sevilla compartimos la preocupación de mantener y proteger el arbolado de las calles y parques de nuestra ciudad. Más aún en los tiempos actuales donde cualquier acción ambiental en este sentido asegura (lo que científicamente está más que comprobado), un atemperamiento del calor, una bajada térmica y frescura junto a los árboles, y un bienestar añadido que la sociedad necesita y agradece.

Pero, además de favorecer a los habitantes y a todos los foráneos que nos acompañan habitualmente, la arboleda urbana junto al estrato inferior de setos y matorrales, conlleva y acoge una variedad de especies animales y aves que conforman un todo; es decir, un ecosistema urbano que nos caracteriza, que es psicológicamente necesario por la salud que nos irradia y que tenemos que proteger y conservar. Así, las alineaciones arbóreas de nuestras avenidas y bulevares forman, junto a los parques urbanos, la esencia de esta masa vegetal que nos sombrea, oxigena, arroja humedad y limpia de contaminantes.

LOS JARDINES HISTÓRICOS DE SEVILLA

El papel que realizan los parques es fundamental. Entre estos enclaves urbanos destacan los jardines históricos de Sevilla y aquellos parques asociados a los Bienes de Interés Cultural.

Uno de ellos sobresale por su grandeza monumental entre la muralla de la Macarena y la fachada principal del antiguo Hospital de las Cinco Llagas, actual Parlamento de Andalucía. Esta masa arbolada –interior y exterior del cerramiento existente- necesita mantenerse con un cuidado exquisito, mediante las operaciones de jardinería y las protecciones y saneamientos necesarios que no menoscaben ni su paisaje ni su monumentalidad, por la acción protectora evidente hacia la ciudadanía. La volumetría de sus altas copas, la diversidad de especies presentes entre las que destacan cedros, palmeras, wasingtonias, tipuanas, ficus, grevilleas, olivos, jacarandas, naranjos, cipreses, bojes, buganvillas, hiedras…  van acompañadas del griterío y canto de múltiples aves como vencejos, estorninos, mirlos, gorriones… que completan la belleza de este enclave sevillano controlando, además, las poblaciones de insectos.

EL ENTORNO PAISAJÍSTICO

Recientemente se ha conocido por informaciones diversas que se pretende “para garantizar la seguridad” el apeo de dos grandes árboles que, sin duda, mermarán la singularidad del parque. Ya en su día con las obras del Parlamento y en su entorno inmediato, se eliminó mucha parte de este antiguo jardín, para que la fachada herreriana del edificio quedara visible y diáfana; ello, además con la aprobación de la Comisión de Patrimonio. Ahora parece que esta tala también se acredita por este organismo “tutelador de los bienes históricos”, cuestión que causa perplejidad cuando lo lógico sería potenciar el entorno paisajístico y proteger esos árboles. Puede decirse que incordian mucho más la fachada las dos garitas de la entrada, que bien podían ser “de quita y pon”.

En el contexto actual de cambio climático, procede lo contrario y las demandas sociales por una coherencia entre el patrimonio vivo y el histórico deben ir de la mano. Además, son bien conocidas técnicas y tratamientos, generalizados en otras ciudades, que protegen su parque arbolado no como mero mobiliario urbano (y prescindible) sino como seres vivos muy importantes y necesarios que nos aportan beneficios físicos y morales. Así pues, no solo el Ayuntamiento tiene la capacidad y obligación de oponerse a tales apeos sino, más bien, asegurarlos.

UN DÍA YO PREGUNTE…

Esas serían las preguntas a formular al Consistorio y a los responsables del Parlamento:

¿Son ciertas las noticias recientes sobre eliminación de dos árboles en el entorno singular de la sede parlamentaria de Andalucía, hasta donde conocemos de forma imprecisa, ya sean Ficus macrophylla, Tipuana tipu, o Cedrus deodara?   

¿No les parece que causará, nuevamente si así se lleva a cabo, una gran indignación en la ciudadanía este “arboricidio” cuando, por contra, debería hacerse un esfuerzo por sanearlos si están enfermos, apuntalarlos si tuvieran ramas en peligro, formar e intervenir la copa si estuvieran desequilibrados…?, etc.

Llegados a este punto de estupor necesitamos tanto respuestas como acciones positivas, a la vez que ejemplares, con el Patrimonio Vivo de Sevilla. Así esperamos.

SOBRE EL AUTOR:JUAN E. MENA CABEZAS

Biólogo e Ing Técnico Agrícola, por la Universidad de Sevilla. Consultor agrario y medioambiental

Participa en varias ONG,s como Red Sevilla por el Clima, Asociación Ciclista Acontramano, Ayuda en Acci9n, Asociación Vecinos La Revuelta-Pumarejo.